No voy a escribir acerca de como nos hacemos viejos no, sino de la diferencia abismal que puede haber (y hay) entre una persona de 22 y una (o unas pocas) de trentaipico....
Hace ya casi un mes me dijo una personita (q cada vez me está demostrando que tiene la cabeza mejor amueblada de lo que deja ver ;) ) que de que hablaba yo con la gente del trabajo, que yo no tenia nada que ver con gente de 30 por muy madura que pueda ser.... y que razón llevaba.
El lunes el viaje a Murcia (q hermosa eres, y q frio hace) fue pasable, quizá demasiado deprisa, creerme q a 160km/h y el conductor hablando x el movil no me sentia muy segura, pero bueno, aceptable. Cena de tapeo (muy nutritiva para una persona enferma) y poco más, dormir toses descansar...
pero ayer el dia vino a ser la muerte, desde que cuando llegas a un sitio y hay sólo dos tias a la única a la que le hacen caso es a la que tenga más tetas (y no era mi caso), entre los viejos conocidos que se cuentan batallitas de gente que no conoces ni conocerás y entre las conversaciones de trabajo en las que (X DIOOOOS) no me interesa nada... pues no se xq era de extrañar q estuviese cabizbaja, somnolienta y aburrida, ¡¡CHAVALES MÁS MADERA!! que me aburro...
En fin... la verdad q me ha salido un blog sin sentido y muy quejica, pero mañana ya escribo algo más optimista (o más reflexionado)
PD: Lo mejor del viaje: la tarde libre dando una vuelta y hartándome de palomitas dulces (rositaaaas) leyendo una revista :p
1 comentario:
uyuyu primero un viaje con treintañeros y luego en casita de relax, luego que si la espalda me esta matando y de aqui a verano con crisis de los 40 :D
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